Hola a todos. Feliz Lunes! Esta semana continuamos con el Crash Course de Uruguay. Recuerden que mientras más sepamos acerca del lugar al que emigramos, mejor preparados estaremos para adaptarnos. Ya cubrimos información básica, historia, literatura, y música. Culminamos la serie esta semana con arte, teatro, cine, e idiosincrasias uruguayas. Finalizamos la semana con un Viernes Sociales en el que uno de nuestros lectores comparte su experiencia haciendo la reválida de sus estudios en Uruguay.
Uruguay cuenta con un gran número de museos, muchos con admisión gratuita, donde se pueden disfrutar de las artes uruguayas (y del mundo). Ademas de ser una manera economica de entretenerse, los museos ofrecen el valor agregado de ayudarnos a conocer e identificarnos mejor con el país.
PINTURA
Pintura Prehistórica y Prehispánica: En Uruguay existen registros de pintura rupestre realizadas entre 6000 a.C. y 1500 d.C. La mayor concentración se encuentra en Chamangá. Lamentablemente, de las civilizaciones precolombinas del actual territorio uruguayo no se conservan muchos pictóricos aparte de diseños grabados en cerámicas y tallas en piedra. Mantente al día con las noticias en el Portal de Museos del Uruguay para que no te pierdas la proxima exposicion de arte prehispanico.
Inicio de la Pintura Nacional Uruguaya: La pintura uruguaya se comienza a definir como tal a principios del siglo XIX con los pintores extranjeros que llegaban de Europa a realizar crónicas visuales sobre los habitantes, paisajes y ciudades; entre estos se destaca Juan Manuel Besnes e Irigoyen (1788-1865). A mediados del siglo XIX el uruguayo Juan Manuel Blanes (1830-1901), conocido como el pintor de la patria, comienza sus óleos de temas históricos, retratos y alegorías. Para más información visita el Museo de Bellas Artes Juan Manuel Blanes.

Siglo XX: Las obras de la gran mayoría de los artistas del siglo XX los pueden ver en el Museo Nacional de Artes Visuales en Montevideo. A finales del siglo XIX se introduce la expresión de pinceladas dinámicas y empastes densos. A comienzos del siglo XX se comienza a desarrollar los géneros futurismo y cubismo y a partir de 1918 Pedro Figari (1861-1938) busca con la pintura afianzar la identidad regional. Visita el Museo Figari en Ciudad Vieja. En la década de 1920 se impone la modalidad planista y a partir de 1930 se sitúa en primer plano la problemática social y política.
En 1934 Joaquín Torres García (1874-1949) funda la Asociación de Arte Constructivo y el Taller Torres García, donde se formó una generación y se desarrollaron los elementos del neoplasticismo, cubismo y primitivismo. El legado de Torres García continúa en sus alumnos y seguidores. Visita el Museo Torres García.

En 1946 Carmelo Arden Quin (1913-2010), Rhod Rothfuss (1920-1969) y el argentino-húngaro Gyula Kosice (1924-) iniciaron el Movimiento Madí que pretende expandir ilimitadamente las posibilidades de continuidad del cuadro. En la década de 1950 se destacan dos corrientes principales, una de profundización realista que buscaba ampliar la plataforma social del arte, y otra atraída por el lenguaje simbólico de la abstracción geométrica. En la década de 1960 destacan los informalistas quienes privilegiaron lo matérico con expresiones más libres y la nueva figuración que incorpora nuevos elementos conceptuales.
Durante la década de 1970, período de la dictadura cívico-militar en Uruguay,
el ambiente artístico queda prácticamente en silencio.
En la actualidad gran cantidad de artistas y productores culturales trabajan sobre diversas líneas tanto en el país como en el exterior. Uruguay cuenta con un pabellón propio en la Bienal de Venecia y en cada edición envía a uno o más artistas destacados del medio. Si bien el arte actual está fuertemente marcado por nuevos medios, la pintura en Uruguay continúa teniendo fuertes representantes.
ESCULTURA
Escultura Prehistórica y Prehispánica: En la localidad rupestre de Chamangá también se encuentran diseños labrados directamente en las rocas. Entre los artefactos arqueológicos más destacados se encuentran los antropolitos, ornitolitos y diversos zoolitos tallados en roca ígnea. Para ver ejemplos de escultura pre-colonial visite los numerosos museos arqueológicos en el país. Puede comenzar con el Museo de Arte Precolombino e Indigena (MAPI).
Periodo Colonial: Hasta mediados del siglo XIX la estatuaria religiosa presente en el territorio provenía principalmente de talleres de santería en Europa y, en menor medida, tallas en madera policromadas realizadas en las misiones jesuitas.
Siglo XIX: Al culminar la Guerra Grande se instala en Montevideo el escultor de origen italiano José Livi (1830-1890) quien realizó numerosas esculturas como la estatua de La Libertad (1866) de la Plaza de Cagancha. Aunque la mayor parte de la estatuaria era para templos o cementerios, diversos encargos para monumentos sobre hechos históricos abren nuevos caminos para la escultura local.

Siglo XX: Paseando por Montevideo es difícil escapar los grandes escultores del s. XX. Pero como pseudo-turista y próximo residente es importante conocer la historia detrás de los escultores que no solo bañan la ciudad de personajes históricos pero adornan las fachadas de edificios y casa de importancia.
Podemos empezar con José Belloni (1882-1965), autor de numerosos monumentos de tema histórico nacional como La Carreta, La Diligencia, El Entrevero, entre otros. José Luis Zorrilla de San Martín (1891-1975) es autor del monumento El Gaucho, la Fuente de los Atletas y el Obelisco a los Constituyentes de 1830, entre otros. Bernabé Michelena (1888-1963) destaca en su serie de bustos de personalidades de la cultura. Una de sus obras más conocidas es el Monumento al Maestro ubicado en el Parque José Batlle y Ordóñez. Antonio Pena (1894-1947) introduce la intención de modernidad en la escultura uruguaya, de sus obras destacan las figuras decorativas de la casa del Arquitecto Vilamajó, los relieves de la sede del Banco República de la calle General Flores y el monumento a Hernandarias en la Rambla portuaria de Montevideo. Severino Pose (1894-1964), discípulo de José Belloni, es autor del monumento a Dámaso Antonio Larrañaga, de la ornamentación de la fachada del Convento de las Clarisas en el barrio montevideano de Nuevo París y del Crucifijo de la Capilla de San Rafael en Maldonado. Edmundo Prati (1889-1970) es autor de los monumentos a Luis Alberto de Herrera y al Gral. San Martín.

En la actualidad Eduardo Yepes (1910-1978), Octavio Podestá (1929-), Enrique Broglia (1942-2013) y María Freire (1917-2015) representan la nueva escultura uruguaya, introduciendo nuevos materiales y texturas. Así como las realizadas por otros integrantes del Taller Torres García. Más recientemente destacan Águeda Dicancro, Mariví Ugolino y Ricardo Pascale, entre otros.
Mañana seguiremos la serie. Como siempre les recordamos a todos nuestros lectores que son bienvenidos a colaborar con este blog. Pueden comentar o escribirnos por email a venezolanosenuruguay@gmail.com